Perucho es una parroquia rural que se encuentra en el
corredor turístico de la “Ruta escondida” del cantón Quito.
Es la más antigua del distrito metropolitano de Quito en
la provincia de Pichincha.
Este lugar ecuatoriano, conserva aún su iglesia
patrimonial de madera (roble, cedro y especies desconocidas) construida en entre
1650 a 1700 y destruida en 1868 a causa del terremoto de Ibarra suscitado en ese
año.
En la plaza central de este pueblo encontramos una curiosa placa descriptiva con la síntesis de un relato escrito por el padre Severo Gómez en la que pone de manifiesto la honradez de los habitantes peruchanos.
La placa en mención dice así:
PLAZA “LOS TRES MANUELES”
naciente república, referentes de la honradez de los Peruchanos. “Los tres Manueles”, nos llena de orgullo cuando revisamos la historia de uno de los capítulos de la vida de García Moreno y recreamos su hazaña. Ellos encabezaron la gestión para la reconstrucción del pueblo después de la devastación que dejó el terremoto de Ibarra de 1868.
Viajaron a Quito para solicitar ayuda al gobierno.
Regresaron con los recursos y con la colaboración de la
comunidad lograron reconstruir algunas edificaciones importantes, entre ellas
nuestra iglesia.
Finalizados los trabajos, nuevamente fueron a visitar el
Palacio de Gobierno en Quito y fueron recibidos por el propio mandatario quien
les interrogó: “ustedes Peruchanos otra vez aquí, ¿quién les ha llamado? Los tres manueles” respondieron “nuestras
conciencias, pues hemos venido a devolver el dinero que nos ha sobrado”.
El Presidente maravillado de este gesto exclamó: hombres
honrados como ustedes necesita la Patria y les pidió que colaboraran en la
administración de las aduanas en Guayaquil.
Síntesis
tomada del libro: “La vida de García Moreno”, del padre Severo Gómez